Castilla León es una espectacular región llena de contrastes y grandísimos rincones ideales para una escapada. Descubre con nosotros los mejores para turismo rural en Castilla León.
Cuando pedimos a los bloggers de viajes castellanoleoneses por sus rincones favoritos de su región para una escapada rural, sus respuestas fueron estas…
Frías (Burgos) – A un clic de la Aventura
Frías se encuentra a 80 km de Burgos y ostenta el título de «Ciudad más pequeña de España» desde el año 1435. Es una localidad pequeña pero con mucho encanto que invita a recorrerla de principio a fin. Ya al acercarte a ella lo primero que llama la atención es su silueta, se encuentra en una zona alta y lo que más destaca es su castillo, que está colgado sobre un peñasco, como desafiando a la ley de la gravedad. Conserva su estructura claramente medieval, con su muralla, de la que se conserva sólo una parte, sus calles estrechas y en cuesta debido al terreno en el que se asientan y las casas construidas en piedra.
En la zona alta de Frías es donde se encuentran sus dos elementos principales: la iglesia de San Vicente Mártir y el Castillo de los Velasco. El Castillo se puede visitar y dentro de él puedes acceder a las murallas y a la Torre del Homenaje, a la que puedes subir si no tienes vértigo. Desde la terraza de esta torre tienes una panorámica extraordinaria de Frías desde las alturas.
Otro elemento que no puedes dejar de visitar en Frías es su famoso Puente Medieval sobre el Ebro, se trata de un puente de piedra que tiene en su centro una torre defensiva.
Te invito a que lo descubras por ti mismo callejeando por sus calles, y si lo haces en invierno comprobarás que su nombre no es por casualidad, así que ven preparado.
Para completar esta info, tenéis un estupendo artículo en este post de aunclicdelaaventura.com.
El Valle de Las Caderechas (Burgos) – El lio de Abi
Si hay un lugar en la provincia de Burgos que me guste y que visite varias veces al cabo del año, ese es el valle de las Caderechas, un pequeño paraíso con su microclima situado en la comarca de la Bureba, entre el páramo de Masa y el valle de Valdivielso.
La suerte que tenemos la Mi Dueña y yo de vivir muy cerca, nos permite disfrutar de su paisaje, de su naturaleza variada y de sus cerezos en flor vistiendo el valle de blanco con verdes y ocres, como si se tratase de un patchwork.
Carreteras sinuosas y estrechas, que terminan en alguno de sus pueblos, marcan la ruta de los cerezos, que en el mes de abril se llena de turistas para disfrutar del espectáculo, no en vano por aquí le llamamos el “pequeño Jerte”.
Si eres de los que te gusta caminar por la montaña, haciendo senderismo, subir al pico Tablones (1.248 m.) no te dejará indiferente ante la vista de los valles de las Caderechas a un lado y de Valdivielso al otro o hacer cumbre en el Castilviejo (1.081 m.) desde donde se domina la práctica totalidad del valle.
Pero no solo naturaleza se puede encontrar en las Caderechas, cuyas cerezas y manzanas reinetas cuentan con el certificado de Marca de Garantía de la Junta de Castilla y León, sus pueblos típicos, sus torres, sus casas solariegas, añaden valor al turismo del valle, que cuenta con una historia milenaria.
La cercanía con Briviesca, Poza de la Sal (cuna del insigne naturalista Félix Rodríguez de la Fuente) y Oña lo hacen de un atractivo turístico estupendo, pero sin aglomeraciones, lo cual es muy de agradecer.
Para completar esta info, tenéis un estupendo artículo en este post de elliodeabi.com.
Navafria – Coleccionando Imanes
Reconozco que no siempre he sido muy fan del turismo rural, pero hace unos años unos amigos se empeñaron en ir unos días en verano a una casa rural. El lugar elegido fue una casona restaurada (enorme además) en Martincano, Segovia. No os voy a engañar: la verdad que el pueblo en sí no ofrecía mucho más que poder desconectar de la rutina del trabajo y ruido que inundan nuestro día a día.
¿Por qué he elegido entonces este lugar y no otro? Indudablemente, por su localización. Parece mentira que a tan poca distancia haya tantas actividades, y tan sumamente diferentes que se pueden realizar.
El primer día, a un corto paseo en coche, visitamos la cueva de los Enebralejos, la más grande de la provincia de Segovia, de la que aunque no tengo fotos, sí guardo un grato recuerdo.
Si no sois muy de cuevas, a tan solo 11 km de distancia tenemos el pueblo de Pedraza, con su castillo, muralla, plaza mayor y cárcel (visitable y muy interesante).
Mucho más cerca, a 5 km y pasando el pueblo de Navafría, nos encontramos con una actividad de lo más original: “De pino a pino”, un circuito de tirolinas y otros obstáculos a 20 metros de altura. Con diversos niveles, adaptados al nivel físico de cada persona, y por tanto para todas las edades. Situado además al lado del área recreativa de Navafría llamado “El Chorro”, con un par de piscinas naturales para poder refrescarse (si vas en verano, claro).
En caso de que tras un pueblo medieval y un poco de ejercicio aún tenemos ganas (o fuerzas) de seguir descubriendo los alrededores, esta vez a media hora podemos sumergirnos en la realeza del siglo XVII visitando tanto el palacio real como los jardines de la Granja de San Ildefonso, y su inevitable parecido con palacio de Versalles en Francia.
Pocos lugares conozco en los que haya un abanico tan amplio de actividades, tanto culturales como físicas; para dar paseos, descansar, bañarse, relajarse, explorar… Tras volver de esos días mi percepción del turismo rural cambió radicalmente y a día de hoy no tendría reparo en recomendarle a cualquiera que le diera una oportunidad al menos a esta zona.
El valle de Sedano – El Viaje de Sofi
Foto CC de Fotos_Mariano_Villalba
De las comarcas que hemos visitado en la zona de Castilla y León nos fascinan todas: la Sierra de la culebra y el lago de Sanabria en Zamora; Candelario y la Sierra de Béjar en Salamanca; Las hoces del Duratón en Segovia con los pueblos de Sepúlveda y Pedraza; Guardo y la montaña palentina; Los Ancares en León o la Laguna Negra en Soria.
Pero hay una, en la provincia de Burgos, a la que volvemos una y otra vez: El valle de Sedano.
Desde la ciudad de Burgos está lo suficientemente cerca como para realizar una excursión de un día, pero a la vez lo bastante alejada de la ciudad para pasar unos días practicando turismo rural en una zona sin masificar y que ofrece grandes atractivos.
Para los amantes de los deportes de aventura los descensos por el río Ebro. Si quieres enfundarte las botas de montaña, hay rutas de diversa dificultad y para todos los públicos. El Cañón del Ebro es la más popular y dura. La de Terradillos a Madrid de las Caderechas es de unos 5 kilómetros, apta para toda la
familia y con final al balcón del Valle de Caderechas.
Aquí también puedes hacer espeleología en el Lago Azul de Covanera o, simplemente pasar un día en la naturaleza en medio de la tranquilidad que ofrece el rumor de ríos trucheros como el Rudrón o el Ebro a su paso por Pesquera de Ebro.
Esta zona no solo despierta nuestro interés por la cantidad y calidad de paisajes en los que disfrutar de la naturaleza. Otro de sus encantos es la posibilidad de visitar la ruta por el Románico del norte de la provincia de Burgos. Tampoco nos dejan de sorprender los paisajes lunares de la Lora, los restos megalíticos, o los pueblos abandonados.
Puedes ampliar esta info en el blog de El Viaje de Sofi.
La Carballeda en Zamora – krrteando.com
España es un país de contrastes donde podremos encontrar cualquier cosa que nos imaginemos. Desde volcanes hasta playas inmensas o ríos caudalosos a grandes desiertos. Por lo tanto hay un montón de lugares que explorar y conocer que no son populares y famosos como por ejemplo la comarca de la Carballeda en la provincia Zamora dentro de la Junta de Castilla y León.
La comarca de la Carballeda se encuentra en el noroeste de Zamora y está situado en los bordes de Castilla y León y es casi la puerta de entrada con Galicia. Con un clima bastante agradable en verano y un frio intenso en invierno, pero bastante bien llevable ya que casi no hay humedad, hay un montón de actividades que se pueden realizar.
Gracias a un montón de kilómetros perfectamente indicados por todo el territorio es un lugar ideal para practicar senderismo, trekking y ciclismo. En verano hay un montón de ríos y playas interiores donde poder nadar y divertirse con los deportes acuáticos. Uno de los lugares más visitados son las playas artificiales que se han creado y que son perfectas para pasar el día en familia. En pueblos como Cional o Valparaiso hay playas de arena y chiringuitos donde poder comer y almorzar disfrutando de un día divertido de verano.
La cultura es otro de los platos fuertes de la zona. Existen una infinidad de edificios religiosos que hay diseminados por la gran mayoría de los pueblos de la zona. Estos inmuebles religiosos son uno de los mejores ejemplos del románico destacando sobre todos ellos la torre templaría que se encuentra en el municipio de Mombuey.
Otra de las cosas que se pueden visitar son los castros celtas que hay en toda esta zona. Son un claro ejemplo de cultura castrense de la época de la edad de Bronce. Uno de los mejores ejemplos de este tipo de arquitectura se encuentra en el Castro que existe en el término Fresno de la Carballeda.
Una de las formas de disfrutar de todo esto es realizando el camino sanabrés en dirección a Santiago de Compostela. Todo un placer para los sentidos ya que además de disfrutar de sus gentes y sus paisajes se puede apreciar una de las mejores gastronomías más contundentes de toda España.
Puedes ampliar esta info en el blog de Krrteando.
Orbaneja del Castillo – TrotaBurgos
Orbaneja del Castillo es un pueblo situado en el norte de la provincia de Burgos, a 66 kilómetros. Para llegar a él desde Burgos hay que coger la carretera de Santander N-623.
Es un pueblo encajado en los cañones del río Ebro y con una arquitectura popular muy bien conservada. Es un lugar que me trae muy buenos recuerdos pues es donde empecé a hacer mis primeras escapadas, acampábamos libremente a la orilla del río (hoy no se puede) y disfrutábamos del entorno cuando aún no era tan conocido como lo es hoy. Nos lavábamos en las gélidas aguas de su hermosa cascada, nos adentrábamos en algunas de sus cuevas y disfrutábamos tomando unas cervezas en el mesón del centro del pueblo, oyendo las historias que nos contaban los paisanos del lugar.
Para acceder tendremos que dejar el coche en alguno de los pequeños aparcamientos que hay en la carretera o incluso orillado en la misma sin molestar. Por unas escaleras junto a la cascada subiremos hasta el pueblo.
Enfrente, arriba en la peña, veremos una extraña formación rocosa conocida como el “beso de los camellos” y es que parecen 2 camellos dándose un beso y el espacio entre ellos forma el mapa de África.
Probablemente, uno de los parajes más bonitos de nuestra provincia. Orbaneja bien merece una escapada de fin de semana, no solo a este bello pueblo sino también por los alrededores. Muy cerca está Covanera, donde se puede ver la surgencia del Pozo Azul, la zona de las Loras con los pozos petrolíferos, el Valle de Valderredible donde podemos ver iglesias rupestres y la Cascada del Tobazo o hacer una impresionante ruta por los cañones del Ebro, desde Valdelateja hasta Pesquera de Ebro.
Lago de Sanabria, Zamora – Sin Parar de Viajar
Uno de los rincones más bonitos de Zamora, aparte de su capital románica, es el Parque natural del Lago de Sanabria. No solo alberga el único lago glaciar de la península, con un entorno natural maravilloso, si no que tiene diferentes caras para cada tipo de viajero.
Si eres un apasionado de las rutas en el parque tendrás decenas de ellas, cada una diferente, yo te recomiendo la ruta del Bosque del Tejedelo con árboles milenarios o la cascada del Sotillo entre otras. Pero si te gusta la historia en esta zona también tendrás tu ración de ella.
En Puebla puedes pasear por sus calles empedradas como hace siglos y visitar el castillo perfectamente conservado y disfrutar de sus vistas al río.
Y si por algo recuerdo con cariño y me encanta esta zona es por los domingos de verano bañándome en en lago, con el agua fría, sí, pero con playas de un ambiente inmejorable.
Playas en el lago hay unas cuantas, aunque personalmente te recomiendo la playa de los enanos, algo más pequeña pero más bonita que las otras.
No olvides que si eres más de frío y nieve tienes la laguna de los peces para divertirte tirándote con trineos.
¿Te he convencido ya para visitar esta maravillosa zona?.
La Alberca – Rutas de España
Quiero aprovechar esta oportunidad que me ofrece Encantro Rural, para hablar del lugar donde pase mi infancia, la Sierra de Francia. Un lugar que poco tiene que ver con la urbe en la que me encuentro desde hace 10 años.
La Sierra de Francia, se encuentra en la provincia de Salamanca, pegando con la Hurdes de Cáceres, aunque no es tan conocida como su vecina, comparten con ella la arquitectura típica Serranas, unos paisajes únicos y una gastronomía particular.
Varios son los encantos que podemos encontrar en la Sierra de Francia, como el punto más alto situado en la Peña de Francia donde encontramos una particular virgen negra. El Valle de las Batuecas, un lugar bastante aislado donde todavía hoy puedes pasar largas temporadas meditando en el monasterio que hay a la entrada, o descubrir algunas de las pinturas rupestres que se encuentran en los abrigos del valle.
Pero si hay un pueblo que es de sobra conocido dentro de la región, es La Alberca. Uno de los pocos pueblos que han mantenido íntegramente su arquitectura y tradiciones con el paso del tiempo. El cual, se ha convertido en uno de los lugares más frecuentados por los turistas que deciden descubrir esta parte de Salamanca.
Aunque no es uno de los pueblos más monumentales, merece la pena recorrer sus calles, para descubrir su Plaza Mayor presidido por un crucero piedra, la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción edificada en el siglo XVIII, o el monumento al marrano de San Antón, una de las fiestas más importante del pueblo.
Una vez conocido el pueblo, podéis dedicarle una mañana en hacer algunas de las rutas de senderismo que parte de La Alberca para conocer todo el encanto del paisaje de la Sierra de Francia.
Monumento Natural de Ojo Guareña – Vipavi
Nos adentramos en la Merindad de Sotoscueva, en la localidad de Cornejo, en la provincia de Burgos.
Sólo hay que seguir un pequeño sendero que nos lleva al exterior del Monumento Natural de Ojo Guareña, una pequeña ermita incrustada en la roca con su decorado exquisito de flora y fauna, la imagen más fotografiada del lugar.
La entrada a las cuevas está junto a las taquillas, en una sala que se usó de ayuntamiento de la localidad hasta 1924.
Ojo Guareña está formada por un conjunto de cuevas vírgenes alojadas a lo largo de 110km de galerías kársticas que fueron utilizadas por el ser humano entre el paleolítico medio y la edad media, dividiéndolo hasta en seis niveles.
Se pueden ver estalactitas, estalagmitas y coladas a lo largo de los 400 metros de la visita que acaba desembocando en la ermita de San Bernabé. En ella encontramos pinturas que relatan milagros y martirios de San Tirso y San Bernabé. También se encuentra la pila del Santo, que según cuentan, se llena milagrosamente por intercesión del Santo, por eso se dice que es agua milagrosa y sirve para curar enfermedades, sobre todo de la vista.
Todavía hoy, en el mes de junio, los lugareños siguen celebrando la romería en esta ermita, donde se congregan más de 3000 romeros.
Es posible realizar otras actividades de aventura y visitas espeleológicas para todo tipo de público que seguro disfrutará de esta arquitectura natural.
Es un pequeño rincón que merece la pena visitar antes o después de realizar una bonita ruta de senderismo por sus alrededores.
Puedes ampliar esta info en el blog de Vipavi.
Descubre estos y otros rincones para una escapada de turismo rural en Castilla León.